Puede que este objetivo nos parezca ambicioso y difícil de incorporar en nuestra vida diaria. Por eso, lejos de preocuparnos por alcanzar esta cifra, nos centraremos en aproximarnos a ella siguiendo la regla de las cinco erres:

Rechazar aquello que no necesites.
Reducir aquello que no necesites.
Reutilizar cada objeto todas las veces que sea posible.
Reciclar aquello que no podemos rechazar, reducir o reutilizar.
Reincorporar (Compostar) el resto.

Los Kits Residuo Cero son una manera fácil de empezar a reducir tus residuos domésticos:

Kit compras

• Bolsas de tela de diferentes tamaños para frutas, verduras y alimentos secos como los frutos secos, las harinas, el pan, la pasta o las legumbres.
• Botes herméticos de cristal, acero inoxidable o plástico para alimentos líquidos y delicados como el aceite, el queso, las especias, las aceitunas, la carne o el pescado.
• Recipientes de cristal, acero inoxidable o plástico para productos de higiene
  y limpieza como el jabón líquido, el champú o el vinagre blanco.  

Consejo: ¡hazlo tú mismo! Elaborar alimentos y recetas en casa favorece de forma considerable la reducción de envases desechables. Puedes hacer pan, bebida vegetal, salsas o conservas en casa comprando los ingredientes necesarios a granel.

Kit higiene

• Cepillo de dientes de bambú y dentífrico sólido o hecho en casa con ingredientes comprados a granel.
• Cepillo de pelo de bambú o Madera.
• Jabón y champú sólidos o botellas de champú y gel de ducha para rellenar a granel.
• Maquinilla de afeitar reutilizable.
• Compresas y braguitas de algodón lavables o copa menstrual.
• Discos desmaquillantes reutilizables.
• Esponja o cepillo de baño vegetal de Luffa.

Consejo: el jabón natural, el vinagre, el bicarbonato sódico y el limón son los protagonistas de una limpieza sostenible. Con estos cuatro ingredientes puedes fabricarte tus propios productos caseros de limpieza. De esta manera, reduciremos la cantidad de envases desechables y conseguiremos higienizar nuestra casa con un nivel de desinfección adecuado y libre de tóxicos.

Kit Pícnic

• Botella de acero inoxidable.
• Fiambrera de cristal o acero para transportar los alimentos.
• Cubiertos de bambú o de acero inoxidable.
• Servilletas de tela.
• Vaso de acero inoxidable, bambú o hierro esmaltado. Pajita reutilizable de acero o bambú.
• Portabocadillos o una tela para envolverlo.
• Bolsas de tela para la fruta.

Consejo: utiliza una tela cuadrangular para envolver tus recipientes de comida, botellas de vidrio o algún otro objeto que quieras transportar. Esta técnica japonesa se denomina Furoshiki y ofrece diferentes maneras de empaquetar un objeto en función de la forma del mismo. De esta manera, protegemos aquello que queremos trasladar y evitamos el uso de otro tipo de envoltorios desechables.

Kit Bebé

• Pañales lavables.
• Esponja natural o toallitas de algodón para la higiene íntima del bebé.
• Un jabón natural sólido o líquido en envase rellenable.
• Un cambiador lavable.
• Unos discos de lactancia reutilizables (la lactancia es la opción más ecológica).
• Biberón de acero inoxidable.
• Ropa y juguetes de segunda mano o de materiales sostenibles y libres de sustancias tóxicas.

Consejo: Para limpiar el culete de tu bebé puedes fabricarte tus propias toallitas húmedas caseras o bien comprarlas reutilizables de algodón y llevar una botella con agua para humedecerlas cuando estés fuera de casa. Otra opción es usar una esponja natural y un recipiente con un poco de agua. Estas opciones son más sostenibles y resultan mucho más económicas a largo plazo. Además, las toallitas húmedas desechables pueden contener muchos tóxicos.

Transformar nuestros hábitos no es algo que ocurra de forma inmediata. Busca apoyo e inspiración en otras personas que también han empezado a reducir sus residuos para compartir inquietudes y seguir aprendiendo con ellas. Encuentra tu ritmo, márcate tus propios retos y celebra cada pequeño logro conseguido.

Escrito por Leandra Boj, Creatividad para ser más sostenible en good things, good planet