Los dulces pecados estivales: todo sobre el melocotón

¿Quieres saber cómo aprovechar al máximo melocotones y nectarinas? Cómo conservarlos, trucos para pelarlos fácilmente, o manejar su exceso de jugo en la cocina. También te damos 3 opciones de almacenamiento para disfrutarlos más allá del verano y una sencilla receta de lassi bien fresquito.

Atención: ¡frágil!

Tanto el melocotón como la nectarina los tenemos que manejar con cuidado. Se colocan en un plato respetando la distancia física, no unos encima de otros.

Para facilitar su transporte, la recolección se realiza casi siempre antes de la madurez, pero como son climatéricos, su maduración continúa gracias a la producción de etileno. En caso de calor intenso, se echan a perder rápidamente. Lo mejor es conservarlos en el lugar más fresco posible, en la parte baja de la nevera. En este caso, hay que sacarlos una hora antes de su consumo para que recuperen su fragancia.

Trucos para pelarlos fácilmente

Dependiendo de la madurez y la variedad, la adherencia de la piel a la pulpa convierte la tarea de pelar en difícil. Para facilitarla, sumerge los melocotones o nectarinas durante treinta segundos en una olla con agua hirviendo. Luego pásalos por un baño de agua helada.

Para separar el hueso: corta el melocotón por la mitad a lo largo del surco central. Gira cada mitad en la dirección opuesta con las manos. Retira el hueso con la punta de un cuchillo.

Jugo en la cocina

El melocotón está lleno de agua. Un activo fresco en el pico de calor cuando lo comes tal cual, pero cuando se trata de cocinar, manejarlo se convierte en una piscina de jugo. Te damos algunos consejos culinarios:

  • Para una tarta: no extender la masa demasiado fina, pincharla con un tenedor y hacer una capa blanda encima, cubriéndola con polvo de almendras. Hornea con la puerta del horno entreabierta para facilitar la evaporación.
  • Para un crumble: fríe rápidamente los melocotones a fuego alto con un poco de aceite o mantequilla. La masa de crumble se hornea por separado en el horno. Dispon los melocotones en un plato y luego desmenuza el crumble por encima.
  • Para una mermelada o compota: macéralos unas horas en azúcar para que pierdan su jugo. Luego los escurrimos. El jugo extraído puede usarse para cubrir un pastel, un té helado o una ensalada de frutas.

Gestionar la abundancia

Tres opciones de almacenamiento:

  • Esterilización: los melocotones se conservan herméticamente en el fondo de un frasco con agua hasta arriba. ¡Pero además, podemos darle sabor! Añade una vaina de vainilla, anís estrellado, hojas de verbena, una ramita de lavanda, romero… También agua de flor de azahar o pétalos de rosa de tu jardín y un poco de azúcar de caña. Es una delicia con requesón, yogur o helado. No los uses en una receta que requiera cocción, ya que pierde su aroma y sabor.
  • Congelación: coloca los melocotones pelados y sin hueso en una bandeja que te quepa en el congelador. Déjalos congelar. Luego despégalos y guárdalos en una bolsa.
  • Deshidratación: corta los melocotones en cuartos y luego sumérgelos en agua de limón para evitar la oxidación. Colócalos en una bandeja para hornear cubierta con papel de horno. Mételas en el horno precalentado a 40°C, una temperatura que conserva los nutrientes, dejando la puerta entreabierta para que se evapore el jugo. Voltea los trozos de melocotón de vez en cuando. Dependiendo de la jugosidad de la fruta y el grosor de los gajos, déjalos un mínimo de ocho horas.

Sencilla receta: lassi de melocotón

Con frutas que son demasiado blandas como para cortarlas en gajos, podemos hacer un lassi, una bebida tradicional de la India hecha a base de yogur. Se bebe fría, ya que tiene un gran poder refrescante. En este caso cambiaremos el yogur por tofu.

Ingredientes:

  • 4 melocotones o nectarinas
  • 120 g de tofu sedoso (o 200 g de yogur natural)
  • un poco de jengibre rallado
  • ralladura de lima y su jugo
  • 1 cuchara grande de azúcar

Mezclamos todos los ingredientes con un procesador de cocina. Sirve esta bebida muy fresca. Puedes darle un toque final con unos granos de polen encima.

Consejos antidesperdicio

  • Los huesos: una vez bien secos, se esparcen al pie de las plantas en macetas o en el suelo.
  • La piel: secada al sol en un plato, dará sabor a una infusión.

Recetas de Domitille Langot, autora, editora y fotógrafa de alimentos para La Ruche qui dit Oui !

Si te gustan nuestros artículos, déjanos un comentario en nuestra página de Facebook. Descubre La Colmena que dice Sí aquí

comentarios

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *